Visitar el museo Museo Antropológico Padre Sebastián Englert es esencial para comprender la rica cultura Rapa Nui, donde podrás ver artefactos antiguos y aprender sobre las tradiciones de la isla.
El lugar ideal para disfrutar de una puesta de sol inolvidable es en Tahai, un complejo ceremonial con moais frente al mar, perfecto para tomar fotos impresionantes al atardecer.
Explorar las playas como Playa Anakena es perfecto para familias, con sus arenas blancas y aguas cristalinas, además de la oportunidad de ver moais junto al mar.
La cantera de Rano Raraku es el lugar a visitar, donde los turistas pueden ver varios moais aún incrustados en la roca volcánica, un verdadero testimonio del proceso de creación de estas imponentes figuras.
Hacer senderismo por el cráter del volcán Rano Kau ofrece vistas panorámicas espectaculares y la oportunidad de explorar un ecosistema único en el mirador de Orongo.
El festival Tapati Rapa Nui, que se celebra en febrero, es una excelente oportunidad para sumergirse en la cultura local con competencias de canto, danza, y deportes tradicionales Rapa Nui.
Visitar entre marzo y junio o entre septiembre y noviembre puede ser ideal, ya que hay menos turistas pero el clima sigue siendo agradable.
Sí, las aguas cristalinas de la isla son perfectas para el snorkel y buceo, especialmente alrededor de la Motu Nui, donde se puede disfrutar de la rica vida marina.
Disfrutar de un paseo a caballo al atardecer bordeando la costa es una actividad romántica que las parejas pueden disfrutar, ofreciendo un momento tranquilo y vistas impresionantes.
Prueben los platos locales en restaurantes como Te Moana, que ofrece delicias como el ceviche de atún o el curanto, un plato cocinado en un hoyo en la tierra con carnes, mariscos y verduras.
Sí, opciones como Eco Lodge Rapa Nui ofrecen hospedaje sostenible que respeta el medio ambiente de la isla, ideal para viajeros conscientes del impacto ecológico.
El trekking hasta la cima del Maunga Terevaka, el punto más alto de la isla, proporciona una experiencia desafiante con una recompensa de vistas 360 grados de toda la isla.
Participar en una tour guiado por un habitante local puede enriquecer tu visita con relatos y leyendas que han pasado de generación en generación, además de visitar sitios clave como Ahu Tongariki.
La tranquilidad de Playa Ovahe la convierte en un lugar ideal para que los niños jueguen en el agua, siempre bajo la supervisión de adultos.
Las réplicas en miniatura de moais hechas en piedra volcánica son un recuerdo popular y significativo que se puede adquirir en las tiendas locales.
Aunque la vida nocturna no es el fuerte de la isla, disfrutar de una cena con espectáculo de danzas Rapa Nui en lugares como Te Ra’ai es una excelente opción cultural nocturna.
Además de Rano Kau, los visitantes pueden explorar el volcán Puna Pau, conocido por ser la fuente del escarlata piedra pómez utilizada para las pukao, o "sombreros" de los moais.
La flora es predominantemente de tipo subtropical y podrás ver especies endémicas. La fauna incluye principalmente caballos salvajes, además de una variada avifauna que incluye el manutara.
Sí, alquilar bicicletas y hacer un recorrido por los principales sitios arqueológicos es una forma ecológica y saludable de explorar la isla a tu propio ritmo.
Ahu Akivi, un lugar especial con siete moais que miran hacia el mar, es menos visitado que otros, pero igual de impresionante y lleno de historia.